Ayer firmé el contrato. Puntualizo: el primer contrato. Resulta que en septiembre, las vacaciones de una a la que sustituyo se solapan con las del otro al que también sustituyo, así que me tocaba hacer 16 días seguiditos sin librar ni un cochino día. Al final lo apañamos más o menos mi SuperCompi y yo para que tuviera siete días libres, doce trabajados y otra vez siete libres. Pues bien, se les ha ocurrido a los jefes que mejor me hacen un contrato de 20 días, después estoy 7 días en paro y luego vuelvo a firmar otro contrato distinto. Joder. Y claro, qué voy a hacer? Porque si les digo que no, pues llaman a otro golito que les firme eso y yo me quedo sin curro. Pero vamos a ver, es una entidad social de las más importantes a nivel mundial (no diré el nombre, que luego siempre es posible que alguien no deseado lea tu blog), qué les costará pagarme siete días más? Pero si en sus arcas rebosantes de doblones no se va a notar!
1 comentario:
Y no solo pagarte 7 días: que tengas cotizada en la seguridad social 7 días más, y que a nivel de antigüedad te cuente desde el primer día del primer contrato, y no se "reinicie" con el siguiente.
Una injusticia, como tú dices. Qué gentuza.
Publicar un comentario