viernes, 5 de octubre de 2012

Mi vida a día de hoy

No sé por qué me cuesta tanto escribir en el blog... me da pena tenerlo tan abandonado... En fin, como sé que hay gente que de vez en cuando se sigue pasando por aquí, actualizo con cómo es mi vida a día de hoy. Y digo a día de hoy porque no sé muy bien cómo será mañana.

En realidad es sólo el curro lo que es tan poco estable que no sé lo que va a pasar mañana. En mayo os conté que nos aplicaban un ERE de reducción de jornada y desde mediados de junio trabajo sólo tres días a la semana y en horario de mañana. Llevamos todo el verano con unos retrasos en el cóbro de la nómina de unos dos meses y medio y todavía me quedan varias por cobrar... Además el INEM nos ha hecho mal los cálculos y nos han estado pagando de menos. Y, además, la empresa está pasando a destiempo los calendarios al INEM, así que encima estamos cobrándo dos meses más tarde.

Pero los del banco se siguen cobrando la hipoteca todos los meses y la luz, el agua y el gas no bajan. Y VanHallen tampoco come menos (os juro que no es normal la cantidad de comida que ingiere este chico...). Así que andamos muy justillos. Qué raro, no? Creo que no hay nadie más en este p*** país que esté en una situación parecida. (Ironic mode OFF)

Con VanHallen las cosas han ido genial todo el verano. Se me pasó todo cuando se acabó el curso y volvimos a compartir más tiempo y más espacios. Ahora nos siento más unidos y más felices que nunca, pero llevamos sólo un mes de nuevo curso y ya vuelve a llegar a casa a las 2 de la madrugada por estar estudiando... No puede llevar ese ritmo todo el curso, no puedes dormir 5 horas diárias durante toda la semana sin descansar ni sábado ni domingo y que luego no te pase factura. Estoy muy preocupada por él, porque está agobiadísimo. Y también estoy preocupada por nosotrxs, porque sé que puede que me vuelva a dar lo mismo que me dió a finales del curso pasado. De momento estoy muy bien, iremos viendo cómo se desarrollan los acontecimientos poquito a poco.

Sabéis qué es lo bueno del ERE? La cantidad de tiempo libre que tengo. Ahora ayudo a mi madre en su academia por las tardes (en realidad, ese es mi único ingreso estable en estos momentos...), en vez de ir una hora voy tres horas al día al gimnasio que me vienen genial, no paro de hacer recetas de repostería nuevas, hago mil manualidades, puedo ir con mis padres de pintxos un lunes por la mañana, ayudo a mi hermano en su huerta... No paro! Y es que me encanta no parar, así que ahora, todo el tiempo que no estoy en la oficina (que es mucho), estoy feliz!